Introducción
Si tienes griferías de acero inoxidable en casa, es probable que alguna vez te hayas enfrentado al problema de que se pongan negras con el tiempo. La buena noticia es que esto no es algo que tenga que ver con la calidad del material, sino más bien con la forma en que lo cuidamos y mantenemos.
¿Por qué se pone negro el acero inoxidable?
Antes de hablar sobre cómo evitar que el acero inoxidable se ponga negro, es importante entender por qué sucede esto. La razón principal es que el acero inoxidable tiene una capa de óxido en su superficie que lo protege de la corrosión y el desgaste. Sin embargo, si esta capa se daña o se rompe, el metal puede oxidarse y aparecer el color negro.
Causas
- La suciedad acumulada y la humedad pueden ser responsables de dañar la capa de óxido.
- El contacto con productos químicos agresivos, como los limpiadores abrasivos.
- La exposición a altas temperaturas también puede alterar la capa de óxido.
Consejos para evitar que el acero inoxidable se ponga negro
Limpieza regular
La limpieza regular es el primer paso para evitar que el acero inoxidable se ponga negro. Lo ideal es limpiar las griferías con un paño húmedo y suave después de cada uso para evitar la acumulación de suciedad y humedad. Los productos químicos que se usen para la limpieza deben ser suaves y no abrasivos, ya que los abrasivos pueden dañar la capa de óxido.
Evitar productos químicos agresivos
Como mencionamos anteriormente, los productos químicos agresivos pueden dañar la capa de óxido del acero inoxidable. Así que para evitar que esto suceda, se recomienda no utilizar limpiadores abrasivos o productos que contengan ácido clorhídrico. En su lugar, se deben utilizar limpiadores suaves y específicos para acero inoxidable.
Evitar la exposición a altas temperaturas
El acero inoxidable es resistente a altas temperaturas, pero la exposición prolongada a temperaturas extremas (como las que se usan en la cocina) puede afectar la capa de óxido y hacer que el acero se oxide y se vuelva negro. Por eso, es importante evitar la exposición directa y prolongada a fuentes de calor.
Conclusión
Evitar que el acero inoxidable se ponga negro requiere de algunos cuidados especiales. La limpieza regular con productos específicos para acero inoxidable, evitar productos químicos agresivos y la exposición a altas temperaturas son algunas de las medidas que se pueden tomar para mantener las griferías en las mejores condiciones posibles.